Hola amigos, esta semana les dejamos una ruta corta de baja peligrosidad y con innumerables historias de extraños sucesos, además de tener un gran valor arqueológico.
Para llegar hasta esta ruta tenemos que dirigirnos a Guimar, salimos de la autopista en dirección ascenso al pueblo de Guimar hasta la carretera general y una vez lleguemos giramos a mano izquierda, rumbo sur. Seguiremos por la carretera general hasta llegar a un badén y pasándolo a mano derecha entraremos por una pista asfaltada que nos llevará al comienzo de la ruta. Encontraremos pequeñas explanadas donde podemos dejar el coche y comenzar la caminata.
El camino no tiene pérdida, en un principio recorremos una pista ancha donde ya nos encontraremos varias galerías y algún pozo con profundidad considerable, no llegamos a ver el fondo. Las galerías y los railes son características de este barranco, siendo numerosas, además de la antigua maquinaria.
A medida que vamos ascendiendo nos vamos introduciendo más en el barranco y la ancha pista por la que íbamos en un principio se va estrechando y se acaba convirtiendo en una especie de cañón con enormes paredes verticales a ambos lados.
A mitad del barranco podemos ver desde el cauce y a unos 100 metros de altura, la Cueva del Cañizo. Su nombre se debe a las varas de madera que se encuentran en el techo de la misma. Esta zona es un importante yacimiento arqueológico, ya que se han encontrado en ella restos aborígenes.
Cerca del final del barranco, encontramos otros cuartos con antigua maquinaria. Antes de llegar a los cuartos de maquinaria, veremos una inscripción en el canal que cruza el barranco de pared a pared, la fecha Izaña 11 de Octubre de 1912.
Llegando al final del barranco veremos unos railes que siguiéndolos nos mostrarán unos vistas espectaculares de las laderas del barranco, el sendero que acabamos de pasar y el cuarto de maquinas. Justo detrás, se encuentra la galería de Izaña, su longitud total se desconoce, ahora ya cerrada y tapiada.
Terminamos el recorrido dirigiéndonos a mano izquierda de los railes, por un sendero que poco se aprecia y casi parece como si estuviéramos en la selva, hasta llegar a una pequeña caída de agua y este será el final de esta ruta.
Esta ruta de baja dificultad, es lineal y se puede realizar en torno a una hora aproximadamente.
Y como siempre, cuidemos el entorno. No es nuestro cubo de basura ; )
Hasta la próxima!
- La información detallada es este blog es solo informativa. Las condiciones y el terreno siempre pueden variar. No actuamos como guías, por lo tanto aconsejamos que si no se conoce el terreno, la actividad y las condiciones meteorológicas que se puedan dar, ir acompañados por una persona experta en la actividad o no realizarla.