Sencillo descenso, con bonitas formaciones rocosas y las impresionantes vistas del Roque Imoque, que nos acompañan en el camino.
Comienzo de la Aventura:
Para comenzar esta aventura, nos dirigimos por la TF-1, hacia Vilaflor. Dejamos el coche en el apartadero subiendo a mano izquierda, en el km 7 de la carretera TF-51.
En nuestro caso lo hicimos circular, subiendo por el lateral del barranco hasta la carretera TF-567. Una vez en la carretera, cogemos hacia la derecha, hasta llegar al barranco de Funes y su comienzo, pero perfectamente se puede hacer con varios coches.
Cauce del Barranco:
Una vez llegamos al barranco, bajamos al cauce fácilmente, por un lateral de la carretera, pasando por un paso subterráneo, que enseguida nos lleva al primer salto de este barranco. El R1, un pequeño salto de 16m, equipado con desviador.
Avanzamos un pequeño recorrido a pie, con pasos y paredes con bonitas formas, que nos recuerdan en parte al barranco del Cuervo y llegamos al R2, de 12m de altura. En este punto ya se ve, el espectacular roque Imoque.
Continuamos caminando y disfrutando de las vistas, hasta llegar al R3, un salto de 14m, en el que la aproximación es sobre lajas y paredes más encajonadas, mostrando tan solo, la cima del Roque Imoque. Este rápel cuenta con un pasamanos, con un punto intermedio.
El camino entre los saltos, es fácil de realizar, con algún destrepe que no conlleva dificultad y así nos vamos aproximando al siguiente rápel, en este caso, el R4 de 9m y seguidamente el R5, un pequeño salto de 5m. Este último, lo hicimos desde árbol.
Seguimos a pie otro pequeño tramo y llegamos al R6, otro pequeño rápel de 6m.
El R7 y el R8, están practicamente seguidos, siendo de 12 y 8m respectivamente. En este punto queda muy poco para terminar este descenso.
Llegamos al R9 y R10 de 11m y 8m, otros dos pequeños saltos, que están seguidos. El R11 y último rápel, es un pequeño salto de unos 3,5m, que con algo de cuidado, se puede destrepar bien y en este caso fué lo que hicimos.
Escape:
Una vez aquí, en este último rápel, solo queda caminar, hasta ver la carretera, a la que accedemos por el lateral izquierdo del cauce.
Conclusiones:
Este descenso en nuestro caso, lo hicimos circular, aunque como decíamos, perfectamente se puede hacer con dos coches. Tiene poco recorrido a pie, si se hace lineal, aunque circular, como lo hicimos, es llevadero. Es un descenso tranquilo y poco frecuentado. Con saltos pequeños y ninguna consideración a tener en cuenta, desde nuestro punto de vista, por lo que lo consideramos un descenso sencillo. La distancia por el cauce es de 1,8km.
Y como siempre, cuidemos el entorno. No es nuestro cubo de basura 😉
Hasta la próxima!
- La información detallada es este blog es solo informativa. Las condiciones y el terreno siempre pueden variar.
- No actuamos como guías, por lo tanto aconsejamos que si no se conoce el terreno, la actividad y las condiciones meteorológicas que se puedan dar, ir acompañados por una persona experta en la actividad o no realizarla.
- Recordamos que la altura de los rápeles son aproximadas.